Hemos consagrado una política de honorarios que se adapta a las necesidades de un trabajador despedido. Por cuanto asumimos la representación sin costo inicial para el trabajador, dado que cobramos un porcentaje (entre el 20 al 25%) de lo que obtengamos. Esto implica que los intereses del cliente son los mismos que los de abogados que lo defienden; que redunda en una alta motivación para realizar un buen desempeño y ganar el juicio, obteniendo el máximo posible.
Si no ganamos tu juicio, habremos trabajado gratis, de modo que daremos nuestro 100% por tí.